Informe forense no descartó mala praxis de un médico del Samic en la muerte de un hombre apuñalado en San Miguel

Ante sospechas por el accionar de un cirujano del Hospital de Oberá, la autopsia al cadáver de Ángel Darío González estuvo a cargo de un perito de Gendarmería. El forense halló una lesión en el hígado que habría sido producto de un elemento romo, es decir sin punta ni filo, lo que podría atenuar la responsabilidad del agresor inicial

El pasado 30 de julio, Ángel Darío González (37) fue apuñalado por un joven de 20 años que se dio a la fuga y estuvo prófugo durante dos días. La víctima fue trasladada e intervenida quirúrgicamente en el Hospital Samic de Oberá, donde falleció a las pocas horas.

Si bien desde un primer momento se determinó la identidad del agresor, ya que varios testigos presenciaron el hecho, también se explicitaron sospechas sobre presunta mala praxis en el nosocomio local.

La intervención a González en el Samic estuvo a cargo de un profesional que, en paralelo, integra el plantel del Cuerpo Médico Forense de la segunda circunscripción judicial, con cabecera en Oberá.

En ese contexto, para garantizar la transparencia del procedimiento, todos los forenses que están bajo la órbita del Poder Judicial de Misiones se inhibieron de participar de la autopsia, examen que finalmente estuvo a cargo de un perito de Gendarmería Nacional Argentina (GNA).

Al respecto, un vocero del caso mencionó que el análisis forense habría determinado que “el deceso fue producto de una hemorragia abdominal por lesión en el hígado ocasionada por un elemento romo”, es decir que carece de punta o filo.

En tal sentido, no se descarta que haya existido mala praxis durante la intervención quirúrgica, según se desprende del correspondiente informe.

“El agresor atacó a González por la espalda con un cuchillo, lo cual por la posición no tendría relación con la lesión en el hígado, que además fue producida por un objeto romo. De todas formas, para más precisiones se citará al perito que realizó la autopsia y las partes podrán evacuar todas las dudas”, agregó la fuente.

Suspicacias

En consecuencia, el resultado del informe forense podría atenuar la responsabilidad del agresor de González, identificado como Braian Sebastián W. (20), quien permanece detenido como imputado por homicidio simple.

Más allá de cualquier especulación, lo cierto es que la víctima padeció dos puñaladas, pero luego trascendieron diferentes versiones -incluso oficiales- que generaron suspicacias.

Víctor De Olivera -hermano y testigo del hecho- indicó que González sufrió dos puntazos en la espalda. Asimismo, la familia aportó fotos de la campera donde se pueden observar dos tajos que habrían sido ocasionados en el ataque. Las marcas se ubican en la espalda.

En la campera de la víctima se observan los puntazos en la espalda

Contrario a ello, en un primer momento desde el Hospital Samic informaron que la causa del deceso obedeció a una “herida de arma blanca en el abdomen” que afectó los riñones.

En tanto, en el informe de prensa difundido por la Unidad Regional II la médica policial en turno diagnosticó “dos lesiones punzocortantes, derecha e izquierda, en región torácica”.

Consultado al respecto, De Olivera ratificó lo que declaró en sede policial y afirmó que agresor apuñaló a su hermano por la espalda. El expediente se tramita ante el Juzgado de Instrucción Uno de Oberá, a cargo del juez subrogante Pedro Piriz.

El ataque

Ángel Darío González fue atacado a puñaladas el pasado sábado 30 de julio, cuando se movilizaba en moto con su hermano.

El agresor fue identificado como Braian Sebastián W., quien permaneció prófugo dos días, hasta que el lunes 1 de agosto se presentó junto a su abogada en la Seccional Quinta y quedó detenido.

El caso que se investiga se registró alrededor de las 18.30, sobre calle 6 del barrio San Miguel de Oberá. Al momento del hecho, Víctor De Olivera conducía su moto y su hermano iba de acompañante. 

“Justo íbamos pasando despacio frente a la peluquería de un amigo y en eso Darío me dice que le hincaron en la espalda. Yo no entendía nada, y veo que el asesino salió corriendo. Paré la moto y ya vi la sangre. Le perforó la campera que tenía. Todavía no entendemos por qué hizo eso. Mi hermano era un hombre trabajador, no se merecía morir así”, subrayó.

“Le hincó a traición”

Luego del ataque González fue trasladado al Hospital Samic e intervenido quirúrgicamente en dos oportunidades, aunque falleció tras agonizar por 24 horas.

El domingo 31 al mediodía la Policía allanó la vivienda donde residía el sospechoso, propiedad de su madre Lidia Rosa F. (40), aunque el joven no se hallaba en el lugar.

Orden judicial mediante, los uniformados registraron la propiedad y lograron el secuestro de un cuchillo casero de hoja metálica, sin marca visible y de 30 centímetros de largo, según informaron desde la Unidad Regional II.

La progenitora aseguró que no veía a su hijo desde el día anterior, al tiempo que comentó que en los días previos se hallaba tarefeando. También la víctima trabajaba cosechando yerba.

Finalmente, a primera hora del 1 de agosto el implicado se presentó voluntariamente en la seccional Quinta -con jurisdicción en el lugar del hecho- y quedó a disposición de la justicia. Por el momento el imputado se abstuvo de declarar.

Sobre las suspicacias del accionar médico en el Samic, el hermano de la víctima subrayó  que el agresor “le hincó a traición y por la espalda. Hay testigos y tenemos la campera de él. Es raro que en el Hospital digan que fue un puntazo en la panza”.

.

.

Deja una respuesta

Tu dirección de correo electrónico no será publicada. Los campos obligatorios están marcados con *