“Este cuerpo legal se expide de manera desfavorable en cuando al beneficio solicitado”, indicó oportunamente el Tribunal de Conducta de la cárcel de Loreto. Contrario a ello, el Tribunal Penal Uno de Posadas le otorgó el beneficio y Gerula violó a una nena de 11 años
Tras purgar trece años y medio por una condena por rapto y abuso sexual con acceso carnal, el pasado 20 de abril Jorge Miguel Gerula (51) recibió el beneficio de la libertad condicional y abandonó la Unidad Penal de Loreto.
Apenas 38 días más tarde, el ex convicto volvió a ser detenido como sospechoso del delito de abuso sexual con acceso carnal agravado por la convivencia en perjuicio de una nena de 11 años, hija de su concubina.
Su nombre trascendió el último viernes como el de uno de los dos evadidos de la comisaría de Alba Posse, aunque ese mismo día fue recapturado en una chacra de Paraje 9 de Julio y reubicado en otra dependencia de la Unidad Regional XI de Aristóbulo del Valle.
Respecto a la primera condena que pesa sobre Gerula, la misma fue impuesta por el Tribunal Penal Uno de Posadas y recién se dará por cumplida el 27 de septiembre de 2027, ya que fue sentenciado a 18 años de cárcel, aunque al purgar dos tercios de la misma obtuvo la libertad condicional.
De todas formas, oportunamente el Servicio Penitencia Provincial (SPP) se expidió de manera desfavorable al pedido de la defensa del imputado.
Según el Acta 688/22 del Tribunal de Conducta de la cárcel de Loreto, el 14 de noviembre del año pasado se concluyó que “luego de haber evaluado todo lo expuesto por las diferentes secciones, este cuerpo legal se expide de manera DESFAVORABLE en cuando al beneficio solicitado en esta oportunidad”.
Por lo que se dejó asentado que Gerula “continúe con el beneficio de las salidas transitorias quincenales para continuar su análisis, en pos de su paulatina reinserción social”.
Indicadores negativos
En octubre del año pasado el Tribunal Uno de Posadas inició los trámites previos a la libertad condicional de Gerula.
Mediante una nota dirigida al alcaide principal Héctor Germán Ayala, director de la prisión, la autoridad judicial requirió informes técnicos, social, psicológico y del Tribunal de Conducta “orientados a resolver la posible libertad condicional” del citado.
Se detalló que el reo fue detenido el 27 de septiembre de 2009 y condenado a 18 años de cárcel. En tanto, tal como se prevé, al cumplir las dos terceras partes de la pena (12 años) estaba en condiciones de gestionar la condicional.
En los informes penitenciarios se dio cuenta que el interno poseía “muy buena conducta y concepto” (7 de calificación) y se hallaba en el período de prueba con salidas transitorias quincenales por el lapso de 24 horas, sin registrar inconvenientes.
En tanto, fijó domicilio legal con una prima y su marido que residen en la localidad de Garupá, quienes lo visitaban y asistían permanentemente.
Hasta aquí eran todos indicadores favorables para Gerula, pero la cuestión cambió a partir del informe psicológico suscripto por la licenciada Cecilia Martínez, jefa del servicio Criminológico de la Unidad Penal de Loreto.
Según la profesional, el interno se hallaba adaptado a la reglamentación interna y tenía buena convivencia con sus pares y el personal penitenciario. Residía en el sector abierto y trabajaba en la carpintería.
Los primeros indicadores negativos surgieron en referencia a la causa que lo llevó tras las rejas, ya que sólo “da cuenta que es por abuso, pero se observa negatividad para responder preguntas relacionadas a ello. No se infiere implicancia por lo que tampoco reflexión respecto a esto”.
Atroz reincidencia
La psicóloga agregó que Gerula tenía buena presencia, estaba orientado en tiempo y espacio y poseía un “discurso fluido pero selectivo respecto brindar detalles”.
“Se evidencia negatividad para visualizar y resolver conflictos. Poca capacidad reflexiva para repensar su conducta”, subrayó.
En ese contexto, Martínez indicó que “por lo mencionado precedentemente, se sugiere que continúe transitando para seguir evaluando su desenvolvimiento en el contexto externo a la institución. Salvo mayor y más elevado criterio de la superioridad”.
La misma profesional participó del Tribunal de Conducta presidido por el director del penal y demás autoridades, documento que se expidió de manera desfavorable al otorgamiento de la libertad condicional del interno.
El citado informe fue elevado del Tribunal Penal Uno de Posadas el pasado 29 de noviembre de 2022. Finalmente, el 20 de abril del corriente año el órgano judicial le otorgó el beneficio a Gerula.
Luego no hubo un seguimiento de su residencia, ya que si bien fijó domicilio en Garupá, se mudó a la zona de Alba Posse con su concubina.
Así se mantuvo en libertad poco más de un mes -un total de 38 días-, ya que el 28 de mayo fue acusado y detenido por violar a la hija de su pareja.
A juzgar por lo atroz de su accionar y su reincidencia en delitos contra la integridad sexual de las personas, el criterio del SPP fue acertado en función a continuar evaluando al imputado en el contexto previo a la libertad condicional. Pero la justicia tomó otra decisión.
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Daniel Villamea, periodista, hincha de River (no fanático), Maradoniano, adicto a Charly García, Borgiano y papá de Manuel y Santiago, mis socios en este proyecto independiente surgido de la pasión por contar historias y, si se puede, ayudar a otros.
