Los policías están imputados por “incumplimiento de los deberes de funcionario público, facilitación de la evasión, falsedad ideológica y posible cohecho (soborno)”. Quien era jefe de la comisaría de Villa Bonita fue apartado del servicio, mientras cuatro subalternos fueron asignados a otras dependencias. Por el momento, el juez Pedro Piriz no ordenó detenciones
El Juzgado de Instrucción Uno de Oberá imputó cinco policías por una serie de delitos, aunque cuatro de ellos continúan en funciones. En tanto, el subcomisario Luis Días Da Silva, quien se desempeñaba como jefe de la comisaría de Villa Bonita, municipio de Campo Ramón, fue apartado del servicio y se encuentra en disponibilidad.
El expediente 93483/2024 2024 investiga hechos denunciados contra el citado Días Da Silva y sus subalternos Jonatan Ariel Jonsson, Alan Mongeló, Javier Rosendo Vareiro y Gerardo Alan Kratty, y está caratulado como “incumplimiento de los deberes de funcionario público, facilitación de la evasión, falsedad ideológica y posible cohecho (soborno)”.
Al ser citados a indagatoria, los cinco implicados se abstuvieron de declarar. El subcomisario es asistido por los abogados José Luis Puyol y Fernando Matías González; mientras que los otros cuatro son patrocinados por Micaela Max, asesora jurídica de la Unidad Regional II.
Por el momento, el juez de Instrucción Uno Pedro Piriz no ordenó detenciones, por lo que tampoco las partes solicitaron eximición de prisión.
Trascendió que mientras los cuatro subalternos que cumplían funciones en Villa Bonita fueron reasignados a otras dependencias de la UR II, Días Da Silva se encuentra en disponibilidad y habría viajado al exterior.
La denuncia
En su edición del pasado 19 de julio este medio publicó detalles de la causa contra los policías.
Fue una denuncia por robo en Villa Bonita lo que derivó en una sucesión de irregularidades que pusieron en la mira a quien era el jefe de la comisaría local y a otros cuatro subalternos, aunque el más comprometido sería el primero.
Ante la gravedad de la acusación, Días Da Silva fue relevado del cargo al frente de la comisaría de Villa Bonita y la Jefatura de la Policía de Misiones dispuso su pase a disponibilidad.
La denuncia que disparó la pesquisa fue radicada por Alejandro Agustín G. (52), quien fue víctima de un asalto a mano armada perpetrado por dos hombres que luego fueron identificados y detenidos.
Ya en el traslado a la dependencia policial, uno de ellos logró escapar esposado y se dio a la fuga, lo que de por sí constituye una grave falencia en el protocolo policial.
Más tarde, cuando fueron tras los pasos del evadido, su mujer declaró que el propio jefe de la comisaria habría propiciado la fuga y más tarde le abrió las esposas.
Tremendo dato dio paso a una investigación interna a cargo de la Unidad Regional II que derivó en las imputaciones.
Como si todo esto fuera poco, en el sumario policial del citado robo nunca figuró el arma utilizada por los delincuentes, la cual fue secuestrada, lo que constituye otra grave irregularidad.
Antecedente similar
Tampoco fue la primera vez que el nombre del subcomisario Días Da Silva. aparece en un expediente administrativo, ya que el mismo estaba a cargo de la comisaría de Villa Bonita cuando el 19 de enero de 2021 se fugaron dos detenidos y, de paso, sustrajeron una moto que estaba en custodia de la dependencia.
Los evadidos fueron Darío Iván Rodríguez (19) y Matías Daniel Correa (19). El primero fue recapturado a las pocas horas, mientras que el segundo permaneció prófugo durante una semana. La motocicleta nunca fue hallada.
A raíz del hecho, considerado un verdadero escándalo institucional, los efectivos que estaban en la guardia fueron pasados a disponibilidad, al tiempo que se decidió el relevo del hasta entonces jefe de la dependencia.
De todas formas, transcurrido poco más de un año Días Da Silva fue designado nuevamente al frente de la dependencia.
Sobre aquella evasión, el boquete por donde escaparon fue hecho con una barra de hierro que fue extraído de una de las cuchetas dispuestas en la celda.
Llamativamente, los policías que se hallaban en la dependencia declararon que no escucharon ningún ruido, ni de los golpes del hierro contra la mampostería ni la posterior sustracción de la moto que se hallaba en el patio.
Tampoco se precisó el horario exacto de la fuga, aunque se sabe que a las 6.25 del día 19 de enero el personal de guardia fue alertado del hecho por otro de los detenidos que compartía el calabozo con Rodríguez y Correa. En total eran cuatro los presos en el lugar.
Así constataron que en el baño del calabozo había un boquete que daba al patio de la dependencia, donde más tarde hallaron una barra de hierro. Pero no sólo eso, ya que al revisar el predio notaron el faltante de una moto que nunca fue recuperada.
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Daniel Villamea, periodista, hincha de River (no fanático), Maradoniano, adicto a Charly García, Borgiano y papá de Manuel y Santiago, mis socios en este proyecto independiente surgido de la pasión por contar historias y, si se puede, ayudar a otros.