Otra vez un pitbull descontrolado generó daño y conmoción. Ayer, un animal de esa raza atacó a varios perros en barrio Norte, uno de los cuales quedó al borde de la muerte.
El hecho se registró sobre avenida Picada Vieja y la tensión se extendió por varias horas, ya que todo comenzó alrededor de las 17.30 y culminó a las 20 cuando personal municipal logró contener al can, indicó un vecino.
Previamente, fueron los propios vecinos quienes lograron reducir al pitbull utilizando un palo para inmovilizarlo del cuello.
“Fue horrible porque el perro estaba descontrolado, atacó a varios animales y le lastimó mucho a uno, que no sabemos si se va a salvar. Gracias a Dios no le atacó a ninguna criatura. No sabemos quién es el dueño del pitbull, pero deberían sancionarlo”, mencionó.
Explicó que en primera instancia llamaron a la Policía, ya que la Seccional Cuarta se ubica a tres cuadras del lugar, aunque la situación recién se calmó cuando agentes de la comuna lograron “dormir” al perro y lo trasladaron al canil.
Qué dice la ley
Lamentablemente, a pesar de la ley vigente se siguen sucediendo incidentes con animales peligrosos en la vía pública.
En abril del 2016 el Concejo Deliberante de Oberá aprobó la ordenanza 2469/16 que regula la tenencia de razas caninas consideradas peligrosas, tanto para los propietarios como terceros, como ser pitbull, dóberman, dogo argentino, fila brasileiro y rottweiler.
Entre otros puntos, se estipula la obligatoriedad del paseo con bozal, un registro de propietarios y multas en caso de incumplimiento de lo establecido. En tanto, el propietario debe garantizar un cerramiento adecuado de su vivienda para proteger a las personas que desde el exterior se acerquen a ellas.
La norma se aprobó tras conocerse una resolución del Tribunal Oral en lo Criminal IV de la Plata que condenó a ocho años de prisión al propietario de un perro de raza pitbull, acusado de “homicidio simple” por la muerte de un niño de dos años en 2014.
.
.
Daniel Villamea, periodista, hincha de River (no fanático), Maradoniano, adicto a Charly García, Borgiano y papá de Manuel y Santiago, mis socios en este proyecto independiente surgido de la pasión por contar historias y, si se puede, ayudar a otros.
