La denuncia fue radicada ante la Comisaría de la Mujer de la localidad de 25 de Mayo por el padre de la criatura, pastor de una congregación religiosa. La revisión médica habría corroborado el abuso sexual. Las sospechas apuntan a un miembro de la misma iglesia. Interviene el Juzgado de Instrucción Dos de Oberá
Una denuncia por abuso sexual con acceso carnal en perjuicio de un nene de 4 años golpeó a una familia de la localidad de 25 de Mayo, como también a una congregación religiosa donde el padre de la presunta víctima se desempeña como pastor.
En tanto, el principal sospechoso es un joven de 19 años, miembro de la misma iglesia, quien hasta el momento permanece en libertad. La causa se tramita ante el Juzgado de Instrucción Dos de Oberá.
Días atrás fueron citados funcionarios municipales que asistieron al progenitor de la criatura, como también el médico que constató signos compatibles con abuso.
Todavía resta la realización de la entrevista en Cámara Gesell, considerada una prueba clave en delitos contra la integridad sexual de menores.
Según una fuente con acceso al expediente, el pequeño es huérfano de madre y se halla al cargo de su padre, quien por razones de sus actividades como pastor, durante varios meses en parte del día lo dejaba a cargo de una familia conocida que pertenece a la misma iglesia.
En ese contexto, principios de año la abuela materna compartió varios días con el nene y comenzó a notar un comportamiento raro, impropio para su edad.
Una de las cosas que más le llamó la atención fue que continuamente se quitaba la ropa sin motivo y hacía ciertos gestos. Fue así que la abuela alertó de la situación al padre y éste buscó asesoramiento.
Ya en una entrevista con profesionales de Niñez y Adolescencia, dependiente del área social de la Municipalidad, el menor dio detalles que apuntaron al sospechoso. La pericia médica también halló indicios de abuso sexual con acceso carnal.
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Daniel Villamea, periodista, hincha de River (no fanático), Maradoniano, adicto a Charly García, Borgiano y papá de Manuel y Santiago, mis socios en este proyecto independiente surgido de la pasión por contar historias y, si se puede, ayudar a otros.
