A diferencia de lo ocurrido el 17 de mayo, cuando se ordenó desalojar a los policías que acampaban en la avenida Uruguay de Posadas y la medida no se concretó, este jueves la misma Policía sí desalojó a docentes. Cuando la justicia no es igual para todos, se convierte en injusticia
Un grupo de docentes autoconvocados fueron desalojados hoy por la Policías de Misiones del acampe en el puesto de la Agencia Tributaria Misiones (ATM), ubicada sobre ruta Nacional 14, en la localidad de San José.
El operativo fue grabado, trascendió por redes sociales y despertó el mayoritario repudio de la comunidad, ya que hasta ayer los mismos uniformados protagonizaron un piquete de 13 días en la avenida Uruguay de Posadas en reclamo de un aumento salarial, lo mismo que piden los trabajadores de la educación.
Incluso, el 17 de mayo el juez de Instrucción 6 de Posadas Ricardo Balor dispuso el desalojo del acampe policial, aunque la medida nunca fue efectivizada.
En cambio, este jueves el juez de Instrucción 4 de Apóstoles Miguel Ángel Farias ordenó el desalojo del puesto de ATM. La medida estuvo a cargo del comisario inspector Silvio Orlando Rodríguez, jefe de la Unidad Regional VII.
Además del despeje, la orden incluía “identificar a cada una de las personas” que participaron del corte de la arteria nacional. Otro intento de criminalizar la protesta.
“En caso de no acatamiento, se deberá proceder a la detención de las personas”, citó la orden judicial.
Cuando los docentes le preguntaron qué tiempo disponían para cumplir con la medida, Rodríguez subrayó: “El tiempo es inmediato, una vez que se da la orden se procede. Nosotros trabajamos de esto”.
“Salen de acá o van presas”, lanzó amenazante.
En el lugar, algunas de las manifestantes reconocieron al comisario Rodríguez como uno de los responsables del operativo del año pasado donde un policía cortó una bandera argentina.
“Él estaba cuando cortaron la bandera”, indicó una docente, ante lo cual Rodríguez retrucó: “Y seguro voy a seguir estando”.
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Daniel Villamea, periodista, hincha de River (no fanático), Maradoniano, adicto a Charly García, Borgiano y papá de Manuel y Santiago, mis socios en este proyecto independiente surgido de la pasión por contar historias y, si se puede, ayudar a otros.