Descontrol y violencia policial en Oberá: uniformados golpearon a un joven, se les cayó un arma y perdieron varias municiones   

“La Policía golpeó a mi hijo adelante mío. Estaba esposado y entre cuatro le dieron piñas y patadas. Ahora le supura sangre con pus del oído y está muy dolorido. Es terrible lo que le hicieron”, lamentó Samuel Santos, quien detalló lo que padeció su hijo Gerardo (24).

El hecho denunciado se registró alrededor de las 3.50 del último domingo en el barrio La Cantera, sobre ruta Provincial 5.

Los policías implicados pertenecerían al Comando, según mencionó el padre del damnificado. También indicó que en las horas posteriores lo trasladaron a varias dependencias, como ser las seccionales Segunda y Cuarta.

Las marcas de las esposas

En tanto, reconoció que el joven estaba alcoholizado, ocasión en la que fue abordado por una comisión policial que actuó con extrema violencia.

“Estaba borracho y discutió con unos vecinos, pero ya nos íbamos. No estaba haciendo nada, mi señora y yo estábamos con él. Cuando les pedí que no lo golpeen un policía me pateó de atrás en la espalda, como vi que estaba descontrolado corrí y parece que me quiso tirar unos tiros porque manipuló el arma y se le cayeron varias balas”, detalló Santos, quien guardó las municiones como prueba de sus dichos.

El damnificado sufrió golpes y excoriaciones en diferentes partes del cuerpo

Indicó que en primera instancia la Policía no quería darle información sobre el paradero de su hijo, por lo que tuvo que contratar a una abogada.

“Lo tenía de acá para allá porque le pegaron mucho, pero como puse abogada lo largaron el lunes temprano. Nunca en mi vida sufrí una actuación policial tan violenta, si mi señora tuvo que correr o le pegaban a ella también”, reclamó.

En la foto difundida por la UR II se observa a uno de los efectivos denunciados

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