Femicidio de Daniela Radke: multitudinario y conmovedor reclamo por justicia en San Vicente

“Justicia”, “Ni una menos” y “Perpetua para el asesino” fueron las consignas de la marcha que convocó a unas 500 personas. El juez Gerardo Casco recibió a la madre y hermanas de la víctima. Detalles de un caso atroz

“Señor juez, justicia por mi mamá”, rezaba la cartulina que llevaba el hijo de Daniela Radke (23), la joven asesinada hace una semana en San Vicente, hecho por el que permanece detenido un sospechoso que fue grabado trasladando el cadáver de la víctima sobre su moto.

El pequeño de 6 años encabezó una multitudinaria marcha que se realizó ayer por las principales avenidas de la ciudad. Por momentos solemne, con la pancarta extendida; en otros apretando entre sus brazos las fotos de su madre, como queriendo abrazarla a ella.

La imagen de Aron conmovió a propios y extraños. La tristeza de su mirada sintetizó la tragedia que sacudió a una familia y a toda una comunidad que pidió “Justicia”, “Ni una menos” y “Perpetua para el asesino”.

“Hoy somos el grito de aquellas que ya no pueden pedir auxilio. Simplemente pedimos justicia, porque hoy parece que hay que suplicar justicia. Hay tiempo para todo y hoy nos toca llorar por el asesinato de Daniela, y le pedimos a Dios que dé sabiduría a las autoridades para esclarecer el caso y que se haga justicia”, expresó el pastor Alfredo Campos en la previa a la marcha. 

Alrededor de 500 personas participaron de la manifestación que partió desde frente a la Seccional Segunda y se trasladó hasta la sede del Juzgado de Instrucción Tres, con intervención en el expediente.

Nélida Dos Santos, la mamá de Daniela Radke, se mostró quebrada y apenas podía sostenerse en pie, por lo que tuvo que ser permanentemente asistida por sus otros hijos.

“Éramos nueve hermanos y ahora somos ocho porque un maldito asesino nos arruinó la vida a todos. Daniela era una buena persona, una hija cariñosa, gran hermana y excelente madre. No hay palabras para lo que le hicieron”, lamentó su hermana Yanina Radke.

El pastor Campos junto a Nélida Dos Santos, la madre de Daniela en la previa de la marcha

Prueba clave

Sobre el hecho, comentó que el pasado jueves a media tarde el ahora detenido buscó a su hermana de su domicilio, a unos siete kilómetros del casco urbano de San Vicente, para trasladarla en moto hasta el inquilinato donde vivía, sobre avenida Néstor Kirchner.

Contó que conocía de vista al sospechoso, quien era amigo de Daniela y otras hermanas porque entrenaban boxeo en el mismo gimnasio.

“Nunca pensamos que sería capaz de hacer eso porque parecía una persona normal, tranquilo. Ese día ella dijo que iban a comer un guiso y después volvía. A las nueve de la noche le hizo una video llamada a mi mamá para decirle que estaba bien, que cenaba y volvía. Pero no volvió más porque el maldito la asesinó”, lamentó Yanina.

Según un vocero del caso, en la citada video llamada la madre de la víctima identificó un sillón que luego fue constatado en el domicilio del implicado.

Pero la prueba clave para dar con el sospechoso surgió a partir del cotejo de las grabaciones de las cámaras de seguridad del inquilinato donde residía, ya que la secuencia permite observar cuando llegaron en moto ya entrada la tarde del jueves.

Asimismo, el aporte de las grabaciones dio con una imagen estremecedora y contundente, puesto que pasadas las 2 de la madrugada del viernes se ve que el acusado cargó el cuerpo inerte de la víctima en la parte delantera de la moto y salió hacia la calle. Luego regresó solo.

El cadáver de Daniel Radke fue hallado a primera hora del viernes en la calle de acceso al barrio Unido, sobre unas malezas al costado del camino.

Familiares y amigos de la víctima encabezaron la marcha

Crimen atroz

En un primer momento su identificación resultó dificultosa porque no portaba documentos, tampoco era del barrio ni la zona. La identidad salió a la luz por los piercings y un tatuaje que tenía la víctima.

Como se viene informando, el resultado preliminar de la autopsia determinó como causa de muerte la “asfixia por estrangulamiento”.

En tanto, los voceros consultados detallaron que en este primer reporte no se detectaron indicios de que la joven haya sido víctima de un ataque sexual.

En ese sentido, si bien a las pocas horas de la detención de Alan Calixto C. trascendió que el mismo poseía antecedentes por delitos contra la integridad sexual, en la víspera una alta fuente precisó que dichos cargos corresponden a otro sospechoso que tuvo el caso en las primeras horas, quien luego fue descartado.

“El detenido tiene antecedentes pero por hechos contra la propiedad, no por abuso sexual”, expresó.

También mencionó la existencia de semen en el cuerpo de la víctima, material que fue recolectado para el correspondiente cotejo de ADN.

Al respecto, existen indicios que señalan que la joven habría tenido relaciones sexuales consentidas con el sospechoso y que fue asesinada en la cama.

Luego de perpetrar el crimen el implicado vistió el cadáver y colocó la ropa interior dentro de la calza. De ahí la cargó en la moto, de lo cual quedó registro fílmico, para desechar el cuerpo en el barrio Unido.

En primera instancia tampoco se halló el celular de la víctima, ya que el presunto autor del hecho dejó su mochila y pertenencias en el local de un conocido, el cual al enterarse de su detención dio aviso a la Policía. Ahora el teléfono será sometido a pericias técnicas en busca de datos que aporten a la causa.

La comunidad movilizada por el femicidio de Daniela

“Nos destruyó la vida”

En la movilización de la víspera, la familia de Daniela Radke destacó la investigación policial por la celeridad en la que dieron con las pruebas que permitieron identificar y detener al sospechoso.

“No tenemos reclamos para la Policía porque actuaron rápido y encontraron al asesino. Lo que pedimos es que la justicia actúe a fondo y le den el máximo castigo. Nos destruyó la vida. Mi mamá está muy mal, y ni pensar en mi sobrinito que perdió a su mamá”, lamentó Mara, hermana de Daniela.

Al arribar frente al Juzgado de Instrucción Tres los manifestantes reclamaron justicia y solicitaron la presencia del juez Gerardo Casco. Transcurridos varios minutos el magistrado accedió a recibir a la madre y hermanas de la víctima.

“El juez no atendió y nos dijo que está muy comprometido con la investigación, que la Policía tiene muchas pruebas y que nos quedemos tranquilos, que se hará justicia. Le dijimos que queremos cadena perpetua y nos dijo que está todo encaminado para eso”, remarcó Mara.

A su vez, varias mujeres expresaron a viva voz sus sentimientos y reclamaron más seguridad en una ciudad que en los últimos años padeció graves hechos, como ser el femicidio de Fiorella Aghem, la joven de 20 años asesinada por su ex Leopoldo Borovski, quien luego fue condenado a prisión perpetua.

También se recordó el caso de Candela Correa de Melo, de 15 años, quien desapareció el 3 de febrero del 2018 y nunca fue encontrada.

Pablo Correa de Melo, el padre de Candela, estuvo presente en la movilización, al igual que  Mercedes Pereira, mamá de Fiorella Aghem.

Pablo Correa de Melo y Mercedes Pereira acompañaron a la mamá de Daniela

Comunidad movilizada

En diálogo con esta matutino, Mercedes Pereira comentó que acompañó a la mamá de Daniela Radke desde un primer momento y estuvo con ella esperando el cuerpo que fue remitido desde la morgue judicial de Posadas.

“Cuando vi su cuerpo, vi el cuerpo de mi hija dentro del ataúd y fue muy difícil. Fueron lágrimas de sangre. Yo pasé por eso y sé lo que se siente. Es lo peor que le puede pasar a una madre. No hay palabras”, reflexionó.

Si bien la convocatoria de la víspera fue importante, para Pereira “hoy (por ayer) tendríamos que estar todo el pueblo reunido pidiendo justicia por Daniela, por Fiorella y por Candela, porque hay que acordarse de ellas”.

“La justicia siempre es a medias, somos presas fáciles, hay una cadena perpetua pero hay una apelación y eso no es justicia”, mencionó respecto a que la condena del asesino de su hija aún no se halla firme.

Aseguró que el femicidio de su hija fue un antes y un después en su vida, al tiempo que insistió con que “toda la comunidad nos tiene que ayudar a nosotras las madres, lo que le hicieron a Daniela le hicieron a mi hija. Hasta cuándo va pasar. Somos familias destrozadas y pedimos acompañamiento. Dónde están los Derechos Humano, porque hasta ahora nadie fue a mi casa a preguntar cómo estamos”.

Por su parte, Pablo Correa de Melo subrayó la importancia de acompañar este tipo de reclamos por justicia, ya que “muchos piensan que no les va a tocar, pero nadie está libre. Yo busco a mi hija desde hace cinco años y voy a seguir hasta obtener alguna respuesta. La sociedad tiene que comprometerse y reclamar a las autoridades que investiguen. Basta de muertes y desapariciones”.

Las hermanas de Daniela Radke anticiparon que en los próximos días volverán a convocar a otra marcha. En tanto, mañana el sospechoso sería citado a indagatoria.

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